Entre la rimbombante publicidad y las expectativas del usuario, suelen existir
grandes diferencias. En el caso de aspectos tecnológicos como el tema de la red
4G y todo lo que le rodea, esto se debe fundamentalmente al aún desconocimiento
general que existe en torno a sus características, beneficios y, sobre todo,
factores a considerar para que su uso no se transforme en una mala experiencia
cada fin de mes. O peor: antes que termine el mes.
Por ello y luego de reiteradas consultas que me han llegado sobre el
particular, me remito a hablar en esta oportunidad sobre el 4G, de lo humano a
lo divino (?).
La red 4G LTE (Long Term Evolution /evolución de norma 3G) es
la cuarta generación de internet móvil que llegó a Chile hace ya un par de años.
He tenido la oportunidad de utilizar la red 4G LTE desde su
lanzamiento en nuestro país y en mi experiencia, he llegado a máximos de 60 megabytes
por segundo (Mb/s) de subida y hasta 100 Mb/s de descarga en zonas de alta
cobertura 4G (ya hablaremos de la cobertura), lo que en cuanto a
experiencia de navegación (velocidad) se acerca bastante a lo que sería el
rendimiento de una red Wi-Fi (en buenas condiciones, claro está, lo que en
Chile no siempre se da).
Considerando lo positivo que resulta este salto tecnológico, la
red 4G implica algunos aspectos que es importante considerar en
cuanto a su uso:
1. Cobertura. Hemos hablado anteriormente que la cobertura de la red telefónica
y de internet varía de una zona a otra, incluso estando en la misma región o en
la misma comuna (en el caso de la R.M.), siendo Santiago Centro una zona
complicadísima debido a la gran cantidad de señales radiofónicas. No obstante,
es un hecho que Movistar tiene el mejor rendimiento en Santiago Centro y a
nivel nacional.
En el caso de la red 4G, los aspectos geográficos son
importantísimos para su rendimiento y cobertura; en ello Chile es, para variar,
complicado. Actualmente, esta red aún no cubre todos los puntos del país e
incluso presenta variaciones o puntos muertos dentro de regiones declaradas
"cubiertas". Para qué hablar de zonas como el centro cívico de Valparaíso
o Santiago, por las dificultades radiofónicas que ya comentamos.
Por ello, no se extrañe si en
sus salidas a terreno pierde el símbolo "4G" en la barra superior de
la pantalla de sus smartphones, pues el dispositivo detecta automáticamente la
mejor red y cuando no está disponible el 4G, pasa inmediatamente a
conectarse por 3.5G (símbolo "H+"), 3G o 2G (GPRS/Edge), lo que cabe
destacar que implica la consecuente disminución en la velocidad de navegación y
tasas de subida/descarga. Una vez que usted se mueva hacia
una zona de cobertura 4G, el teléfono volverá a mostrar el símbolo y
presentar, en consecuencia, el mejor rendimiento de navegación en internet.
2. Consumo de internet. Un problema común de los nuevos usuarios de 4G es que
consumen su cuota de navegación mensual en los primeros días del mes. Esto
ocurre porque, por defecto, los smartphones de gama media y alta adaptan su
rendimiento multimedia y tasas de subida/descarga de archivos a la red móvil
disponible.
La red 4G es de alta velocidad y,
por ello, aplicaciones como YouTube, de audio, archivos segmentados por calidad
(imágenes, sitios web no responsivos, etc.) y la opción de "compartir
internet" con otros equipos, implican tráfico de archivos en alta calidad,
que son considerablemente más "pesados" que los archivos adaptados
para redes 2G/3G y por ello, en general, consumen más rápidamente la
cuota de internet mensual.
Para revisión habitual de correo electrónico y uso de redes sociales
esto no reviste ninguna complicación, pero cabe considerar este aspecto para
otro tipo de aplicaciones o usos como los anteriormente mencionados. Esto se puede controlar configurando el uso
de red de cada smartphone, en el apartado “Redes móviles” o similar, dentro del
menú de Configuración del equipo (sea Android, iPhone, Windows Phone u otros).
3. Consumo de batería. El uso de la red 4G implica un mayor flujo de datos para
el dispositivo móvil y por ello, un
mayor gasto de energía en la navegación de internet. En el caso de equipos de
gama alta esto no se nota mayormente, pues en general estos equipos tienen
baterías de alto amperaje. No obstante, con el fin de ahorrar energía,
le sugiero en lo posible conectarse a la red Wi-Fi en la oficina y donde se
encuentre, en caso de estar disponible.
Párrafo aparte para derribar el mito de que el Wi-Fi consume más
batería; al contrario, su rendimiento es considerablemente mayor que las redes
3G y con mayor razón 4G. Si no quiere usar redes Wi-Fi por un tema de
privacidad está bien, pero si es por batería, no se preocupe.